VICTORIA Eugenia ACOSTA

Bogotá, Colombia, 1960

De nuevo me refiero a la obra de Victoria Eugenia Acosta, joven artista que, sin estudios en una Escuela de Bellas Artes, ha demostrado un excelente manejo de la acuarela y un vivo interés por trascender la representación aparencial de la naturaleza.

Luego de numerosos trabajos relacionados con el mundo de las flores, vistas de cerca e incluso por dentro de sus corolas, la pintora se ha interesado por otros temas, los cuales de todos modos presenta con la misma intensidad cromática y con la misma observación vecina que, en una primera mirada, no hace aparente el motivo tratado. Es decir, que ya puede anotarse que Victoria Eugenia tiene una manera especial de pintar y que cualquier asunto que aborda lo domina de expresión propia.

No es fácil alcanzar esto y muy seguramente la artista está convencida de que su producción apenas está comenzando. Empero, está comenzando con paso firme y, sobre todo, con una gran dosis de personalidad. El colorido encendido y, en veces, estridente, junto con una visión totalizante y a ras de las superficies así lo demuestran.

Algo que resulta plenamente convincente en su obra actual es la sinceridad de su trabajo. Victoria Eugenia pinta lo que conoce, lo que tiene en torno lo que más le gusta; pinta, básicamente, su vida, sin ninguna pretensión de estar haciendo obras intelectuales o dignas de museos tradicionales. De allí que una ráfaga de viento fresco, de energía y de ánimo se desprenda de sus mejores acuarelas, las cuales son tanto más atractivas cuanto más espontáneas hayan sido en su realización.

Germán Rubiano Caballero


Obras

Acosta Victoria victoria acosta1
Acosta Victoria Eugenia
Gea
1995
40 x 32 cm
Serigrafía
Taller Arte Dos Gráfico
160 Ejemplares